"Os deseo a todos, a cada uno de vosotros, que tengáis vuestro motivo de indignación. Es un valor precioso. Cuando algo te indigna como a mí me indignó el nazismo, te conviertes en alguien militante, fuerte y comprometido. Pasas a formar parte de esa corriente de la historia, y la gran corriente debe seguir gracias a cada uno. Esa corriente tiende hacia mayor justicia, mayor libertad, pero no hacia esa libertad incontrolada del zorro en el gallinero."
(Stéphane Hessel)
"Despertar" quiere decir salir del sueño de la rutina, reencontrarse con motivaciones o indignarse. Probablemente al pensar en este sentido vengan de inmediato a la cabeza imágenes de la acampada de Sol, la llamada "Spanish Revolution" y el movimiento 15M-Democracia Real ¡Ya!
Otros ejemplos al uso pueden ser las manifestaciones del "No a la Guerra de Irak", las campañas internacionales contra las minas antipersonas y la creación del Tribunal Penal Internacional.
Sobre estos ejemplos se pueden hacer varias consideraciones:
-Estos "despertares" especialmente el primero, pueden surgir muchas veces por excusas más que por causas (que generalmente se dejaron pasar).
-Solemos comportarnos como participantes contingentes: tenemos en cuenta la situación y no colaboramos si otros no lo hacen. Necesitamos percibir por parte de lo demás que ellos también creen en el buen rumbo del proyecto. Para ello articulamos conductas de tipo cultural, ético y de convenciones sociales además de utilizar la experiencia.Como elemento fundamental de participación y despertar ciudadano resulta imprescindible mencionar al voluntariado. Los voluntarios son el alma del Tercer Sector y de las ENL por su carácter altruista y solidario. Precisamente teniendo en cuenta ese ámbito solidario se pueden añadir unas matizaciones críticas:
- Durante los últimos años el voluntariado se ha convertido en el "núcleo duro" de la participación social, eliminándose prácticamente cualquier otra forma.
- Existe una fuerte colonización del voluntariado por parte de los poderes públicos y un debilitamiento de la acción colectiva como forma de participación social. El voluntariado propuesto busca más la participación de uno en uno y amortigua cualquier expresión de denuncia social, reivindicativa o disidencia (¿dónde están en momentos de crisis los miles de voluntarios de la Expo?).
El cómo complementar la espontaneidad y valores de ambas manifestaciones de participación llevan a la pregunta y reflexión final:
¿Se pueden educar las causas de reacción?
Lo ideal sería conseguir una conciencia social desde la infancia que ayudara en la militancia de un voluntariado responsable y no alejado de la acción colectiva. Conseguir este grado de participación social haría posible la creación de lazos verdaderamente sólidos al colaborar con instituciones empresariales, académicas y gobiernos de turno para el perfeccionamiento y mejora de la función representativa del gobierno.
Este sería el verdadero "despertar": aunar el poder de la participación para que a partir del Tercer Sector se construya un lobby más fuerte, responsable y ético que el que ha estado surgiendo durante estos últimos años. Significaría la consolidación del grupo de interés de la ciudadanía.
